Retrato de Nubia es una novela de exilio, escrita con la eficacia del prosista y la doliente generosidad del poeta, dos mundos que conviven en Rodolfo Martínez Sotomayor autor de esta obra. Una de las virtudes de esta novela radica en su prosa que sin perder cierto aliento poético no incurre en la frecuente tentación que mestiza poesía y prosa, géneros que reinan, con mejor fortuna, por separado. Rodolfo mantiene a toda costa el pulso del narrador y un severo control sobre el relato, de este modo incorpora tramas y sub tramas, escenarios donde conviven y sobreviven los personajes de este autorretrato.
Digo autorretrato porque comparto la idea que una vez leí en la columna que escribía Francisco Umbral para el diario El Mundo donde afirmaba que los escritores solo hablan sobre sí mismos y toda obra literaria es en gran medida autobiográfica. El acierto del escritor radica en hacernos creer que habla de otros y Rodolfo logra hacernos creer que habla de Nubia, de Marcos, de Jorge, de Vivian, de Carlos, una acuarela de personajes que se hacen verosímiles en la red del escritor, un señor que logra atraparnos con las palabras.
Retrato de Nubia es sin lugar a duda una buena novela, escrita con maestría, donde las reflexiones no ahogan la vida de sus instintivos personajes, una interacción que refleja, quizás sin proponérselo, la sombría imagen del vacío que nos aqueja y conduce a la decadencia, preámbulo de nuestro final como civilización si no hacemos algo por remediarlo.
Hay momentos de un intenso erotismo que resulta coherente con el relato y no desborda, ni caricaturiza esta novela de exilio. Si, de exilio, con mayúscula, que es la mejor y también la peor de las patrias posibles; el exilio es la patria de los personajes que habitan el Retrato de Nubia, unos seres que solo viven en el presente porque el pasado está signado por la huida y la muerte. En esta novela las retrospectivas saben a presente, ese difícil ahora que es caldo de cultivo donde la supervivencia aúna a extraños compañeros de viaje.
Retrato de Nubia es también el retrato de una ciudad que cambia a un ritmo vertiginoso, propiciando el naufragio de los augurios que resultan de las encuestas y los estudios de los sociólogos. Una ciudad que hace imposible el escribir una novela definitiva sobre sobre ella, si es que se puede escribir algo definitivo al margen de lo sagrado.
He terminado esta novela con la certeza de que Rodolfo Martínez Sotomayor ya posee las herramientas y la gravedad necesarias para aceptar nuevos desafíos en este género literario, que es para muchos el escalón más alto de la literatura. Por todas estas razones les recomiendo Retrato de Nubia, que se disfruta con el cada vez más escaso placer que proporcionan las buenas compañías.
Para adquirir un ejemplar de Retrato de Nubia (Editorial Silueta, 2017), de Rodolfo Martínez Sotomayor, pinchar en el enlace: https://www.amazon.com/Retrato-Nubia-Rodolfo-Mart%C3%ADnez-Sotomayor/dp/0998687626/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1533648095&sr=8-1&keywords=retrato+de+nubia
Eduardo Mesa
(Foto: cortesía del autor)
Eduardo Mesa (La Habana, 1969). Ha publicado El bronce vale y otras crónicas (Editorial Silueta, 2011) y Cuaderno para el viaje (Editorial Silueta, 2017) y es coautor de la compilación Homenaje a Pedro Claro Meurice Estiú (Editorial Silueta, 2012). Fue fundador de la revista Espacios, dedicada a promover la participación social del laico. Coordinó la revista Justicia y Paz, Órgano Oficial de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba y el boletín Aquí la Iglesia. Formó parte de los consejos de redacción de las revistas Palabra Nueva y Vivarium. Ganador de los premios de poesía Ada Elba Pérez y Juan Francisco Manzano. Ha colaborado con las revistas Convivencia y Conexos. Edita el blog Fe de Vida, donde trata temas relacionados con la fe, la sociedad y la cultura. Tiene en proceso de edición el libro “Crónicas de una fe”.
Rodolfo Martinez Sotomayor
(Foto: cortesía del autor)
Rodolfo Martínez Sotomayor (La Habana, 1966). Ha publicado los libros Contrastes (La Torre de Papel, 1996), Claustrofobia y otros encierros (Ediciones Universal, 2005), la compilación de textos Palabras por un joven suicida: homenaje al escritor Juan Francisco Pulido (Editorial Silueta, 2006), Tres dramaturgos, tres generaciones (Editorial Silueta, 2012) y la novela Retrato de Nubia (Editorial Silueta, 2017). Cuentos suyos han sido incluidos en recopilaciones y antologías como Nuevos narradores cubanos (Siruela, 2001), traducido al francés por Edition Metalie, al alemán por Verlag, y al finés por la editorial Like, Cuentos desde Miami (Editorial Poliedro, 2004), La isla errante (Editorial Orizons, 2011), Cuentistas del PEN (Alejandría, 2011), Reinaldo Arenas, aunque anochezca (Ediciones Universal, 2001). Su cuento Encuentro fue traducido al húngaro por la revista Magyar. Algunos de sus poemas aparecen en las recopilaciones Poetas del PEN (Ediciones Universal, 2007), La tertulia (Iduna, 2008), y La ciudad de la unidad posible (Editorial Ultramar, 2009), traducida al inglés por la misma editorial. Ha publicado críticas de cine, de literatura, de teatro, artículos de opinión en revistas y periódicos como: Diario Las Américas, Encuentro, El Nuevo Herald, El Universal. Fundador y Presidente de la Editorial Silueta; Director de la revista Conexos.