Mujer Mujer
No dice malas palabras, cocina bien y lleva filo blanco en el borde de las
[uñas.
Es mujer difícil y nunca paga.
Se depila todo el cuerpo y va a la bodega en pullas.
No juega a la bolita y aguanta un tarro, y dos también.
Siembra plantas y cría hijos.
Sabe lo que pasará en el próximo capítulo de la telenovela y lo cuenta.
Lava la ropa cara a mano y cocina rico para toda la familia de su marido.
Limpia el tragante del fregadero y no se emborracha, ni fuma tabaco.
No se droga salvo con reductores de grasa o meprobamato y no sabe
[lo que es
una resaca.
Compra flores, pero asegura que son regaladas.
Finge orgasmos.
No se ríe a carcajadas ni juega dominó.
Se acuesta con sus amantes en la cama matrimonial.
Es heterosexual.
Sabe escuchar en silencio y jamás pide la palabra.
Sólo llora lágrimas de cocodrilo.
No lee filosofía, no opina sobre política y es buena esposa, buena madre y
[buena querida.
No da el culo, no eructa, no se tira pedos, no le pica nada ni se rasca.
No tiene ojeras ni mal aliento en las mañanas.
Calla ante la suegra mientras humilla a su nuera.
Saca las uñas por su hombre y le lava los calzoncillos y las medias.
Limpia los muebles con un trapito húmedo.
Escucha Álvaro Torres todos los días, mientras barre y pasa el trillo por la
[casa.
Habla bajito pero sabe todo sobre todos en el barrio.
No decide, acata decisiones.
No se masturba, no ve pornografía y sabe tejer.
No pierde la compostura.
Lleva las cuentas del hogar y clava dinero.
Mujer-Mujer no se rompe por las cosas inefables de la vida.
Mujer-Mujer sueña sólo cuando duerme.
Diario
I
Quizá llore porque me cuesta asumir que todo sea tan perfecto contigo que me haga replantearme el sentido de las cosas. Y no encuentro alivio salvo cuando te toco y todas las preguntas quedan anuladas y todas las respuestas son correctas. Pero entonces abro los ojos en la otra realidad, donde ninguna pregunta es a lugar y todas las respuestas duelen. Sola en medio de la calle donde cada acera es el universo de una de las dos posibilidades, y yo invariablemente camino hacia la de las preguntas trampa y las respuestas espada, pensando en Dios y preguntándome por qué.
II
Hoy, por primera vez en doce años, he soñado con W y no fue una pesadilla tumorosa. Lo calificaría de sueño desagradable simplemente. Yo estaba en la calle, la madrugada habanera, la única que puedo soñar deforme en foto fija, de película de rollo vencido. Llevo días durmiendo solo cuando el sol sale y como un bebe a las tres de la tarde. Un maleficio de luna me saca de mi casa después de las doce de la noche.
Soñaba: Andaba con un piquete y estaba drogada. Se sentía raro soñar que estás drogado y que el viaje es bueno. Llegábamos al apartamento de W, él estaba sentado en un sofá, muy delgado y con el pelo negro. Unas escaleras por detrás de él se repetían por enésima vez en mi subconsciente y él, sentado en un sofá, manipulaba el mando de un juego y miraba fijamente un televisor, con dos personas más, dos muchachas.
Yo estaba incómoda, sobre todo porque W y una de las muchachas estaban vestidos de militar. Curiosamente el uniforme de W también era de mujer. Creo que subí las escaleras pero no llegué a ninguna parte. Me desperté.
Claudia Cadelo de Nevi
(Foto cortesía de la autora)
Claudia Cadelo de Nevi. Nacida en La Habana, en 1983. Graduada de la Alianza Francesa de Cuba, donde también ejerció como profesora. Por algunos años sostuvo el blog Octavo Cerco, dándose a conocer dentro del periodismo alternativo cubano. Allí también dio a conocer sus dibujos, expresiones de su auto-exploración de la condición femenina. Desde hace un tiempo publica sus textos literarios en un bloga llamado “notas sin cabeza”.
Por fin apareciste!! No se si estas en Cuba o fuera?’lo que se fue que nos dejaste botaos a todos tus lectores de octavo cerco, gracias por dejarte ver
Un saludo….